La experiencia fue inmejorable. Llevaba el pelo con un color bastante apagado, es lo que tiene las tonalidades rojizas que requieren de muchos cuidados para mantenerlo siempre perfecto.
Yo siempre había oído hablar del contouring con maquillaje pero nunca con los reflejos del pelo, los resultados saltan a la vista en las fotos.
Una de las peluqueras, Eva, con la que también pude tener una conversación muy distraída acerca de la alimentación, ser flexivegano, vegetariano....
Lo que más me gustó, fue que la idea que llevaba en mente era imposible y me recomendaron algo mejor dentro de las expectativas que yo tenía. Mi idea inicial era ponerme el pelo violeta, pero tenía la raíz de mi color (marrón oscuro), el pelo caoba y las puntas algo más claras por el desgaste del tinte. Me recomendaron una base violín (violeta oscuro) con reflejos rojizos para contornear mi cara y afilar los rasgos que tengo más redondeados.
Yo siempre había oído hablar del contouring con maquillaje pero nunca con los reflejos del pelo, los resultados saltan a la vista en las fotos.
Sin llevar absolutamente nada de maquillaje se puede ver cómo se me aclaran las ojeras y mi cara no se ve tan redonda. Mi color se ve uniforme con brillo y fuerza sin necesidad de meter la tijera.
Realmente un trabajo de grandes profesionales.
Si queréis saber más acerca de los trabajos os dejo un enlace a su Facebook para que comprobéis por vosotros mismos: Raffel Pagès by Sandra M
Comentarios
Publicar un comentario